12 mayo 2006

El agua de la ducha

Mientras el agua de la ducha comenzaba a recorrer su cuerpo yo permanecía desnudo en aquella cama donde ya no regía ningún orden. A pesar de encontrarme completamente exhausto, continuaba buscando por todas partes el calor residual de aquella noche de pasión que lentamente se desvanecía...
El hipnótico sonido del agua pudo conmigo, cuando recuperé la consciencia me encontré con una nota encima de la mesilla de noche:

"666-12 37 37
Ha sido un auténtico placer,
Lidia"


Miré mi teléfono, eran las 5 de la tarde. Hacía horas que debía haber abandonado aquel hotel, ¿qué había pasado?.

Durante las dos horas que duró el viaje de vuelta no dejaron de acompañarme la lluvia y el extraño pero excitante recuerdo de aquella noche.

Tenía que retomar mi vida, no encontré la nota en mi bolsillo, ¿la había olvidado intencionadamente en el hotel?, ¿llegó a existir Lidia?, ¿acaso importaba algo ésto?

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