30 agosto 2006

Infidelidades de verano (I)

Viendo ayer el telediario del mediodía me encuentro con esta curiosa noticia:

"El 44% de la gente ha sido infiel durante el último verano".
No tengo ni idea por qué pero me parece un dato exagerado. De todas formas analicemos lo que esto representa de dos formas, en primer lugar haremos un análisis matemático de este dato, para después adentrarnos en el por qué de estas infidelidades desde el punto de vista fisiológico y/o moral.

EL ANALISIS MATEMATICO

Para que nos sea muy duro esto dejaremos parte del rigor que requeriría este análisis aparcado. Para hacerlo más fácil, redondeemos y por un momento imaginemos que el 44% se convierte en un 50%. Esto significa, así a bote pronto, que o tú o tu parejita os la estais colocando con otra/o. Como contra las teorías de los grandes números no se puede hacer nada, salvo excepciones como el sorprendentemente eficaz carnet por puntos, me temo que algunas de las medidas contra posibles impactos emocionales son:

1) Asumir que probabilisticamente tenemos casi medio cuerno.
2) Aprender a llevarlos con dignidad.
3) Ponerlos para que en el caso de llevarlos no caigamos en una honda depresión ya que de esta manera podremos escudarnos en que tenemos aquello que merecemos.

Para los más frikis y adoptando un pelín más de rigor, veamos que nos dice el teorema de la probailidad binomial de Bernoulli acerca de cuantos veranos necesitamos para tener unos preciosos cuernos o, lo que es lo mismo, ponérselos a nuestro partener, cónyuge o similar:

Sea p la probabilidad de éxito, sin que sirva de precedente en este caso consideraremos éxito a la infidelidad, es decir, 0,44
Sea q la probailidad de no serlo, es decir, 1-0,44 = 0,66
Sea r el número de veces que deseamos obtener "éxito", es decir, ser infieles, pongamos r=1 para este caso de estudio
Sea n el número de veranos que van transcurriendo, uno tras otro como si nada, por ejemplo adoptemos n=10 , de los 20 a los 30 años por ejemplo.

La probailidad de r éxitos (cuernos) en n ensayos (veranos) es:

CUERNOS = n! / [ r! (n-r)! p{elevado n} q{elevado (n-r)} ]

CUERNOS = 0,9737 <--> 97% de posibilidades de después de 10 años de relación lucir unos cuernos de última generación.

LAS POSIBLES CAUSAS Y LAS TEMIDAS CONSECUENCIAS

1. El por qué de los amores de verano.

En verano,el cuerpo produce más melatonina, una hormona que nos pone de mejor humor y más predispuestos al erotismo o, lo que es lo mismo, tomar el sol nos pone a parte de morenos más calientes que un caldero.

2. El origen de los amores de verano o el mito de la media naranja.

En la mitología griega podemos encontrar a Andrógino, que era un ser con genitales masculinos y femeninos que fue partido por un rayo que lanzó Zeus. Este personaje mitológico a derivado en occidente en lo que ahora denominamos "media naranja".
Desde siempre se ha asociado al enamoramiento con la irracionalidad, Bernard Shaw por ejemplo nos decía que "enamorarse es exagerar la diferencia entre dos mujeres" (aplicable a hombres también). Shakespeare, en "Sueño de una noche de verano", describe ese temple irracional del amor mediante unos duendes que mueven los hilos del amor mientras las personas duermen, provocando que al despertar se enamoren caprichosamente tan pronto de una como de otra, la bella de la bestia, el cuerdo de la absurda, la mujer apasionada del varón que la desprecia.

3. La gran esperanza

Queridos amigos, por suerte unos científicos alemanes están desarrollando un spray que contiene oxitocina, una hormona que se produce en el cerebro y es liberada por la glándula pituitaria, se asocia con la afectividad, la ternura y habilidad para mantener relaciones interpersonales saludables. También influye en funciones tan humanas como el enamoramiento, el orgasmo y el parto. En otros estudios, la «hormona del amor», por otros llamada, la "molécula de la monogamia" o "molécula de la confianza", ha sido ligada a la capacidad de confiar en otras personas y cuidar de ellas. Con dicha aplicación se verían reducido el estrés físico y emocional, que nos lleva a discutir con la pareja.

...

No hay comentarios: